7 de julio de 2015

DEL MIEDO A LOS MECANISMOS DE DEFENSA

0 comentarios
 
El ser humano de generación en generación fue grabando estos hechos intensos que era una llamada de atención ante el cual su integridad psíquica y corporal estaba en peligro. El hombre primitivo aprendió que la figura, olor, color y sonidos de algún animal pondría en peligro su existencia, ante esta realidad él sabía que  tenía que cuidarse, defenderse o huir. A medida que se fue desarrollando sus mecanismos fueron mucho más complejo porque no tan solo entraba el conocimiento y su comportamiento con el medio circundante, como forma de adaptación a la naturaleza,  sino también  al medio cultural con sus valores sociales en la que pertenece.  


Estas formas o estructuras de defensa lo aborda Freud con el concepto de mecanismos de defensa, en la que establece como las técnicas del inconsciente. Como las experiencias negativas que hacen sufrir al ser humano alterando su armonía, poniendo en peligro su estabilidad psíquica, estas el hombre las borra de lo consciente y queda grabado como algo prohibido en la que no le es lícito volver a vivir o traer al plano consciente. 

Cuando este tiene experiencia de imágenes similares al trauma vivido el inconsciente es el  encargado de minimizar las consecuencias de eventos demasiado intensos, para que el individuo pueda continuar con sus funciones. Dichos mecanismos de defensa, permiten que la vida este dentro de una determinada armonía psicología que le sirve de garantía para la adaptación con el medio.

Cuando este mecanismo no es eficaz, el ser humano empieza experimentar verdaderos desequilibrios  emocionales como ser: estrés, ansiedad y/o depresión. Estos algunas veces son acompañados con la perdida de sueño, apetito o el cuerpo empieza hablar como ser las enfermedades psico-somáticas como úlceras etc. Y en el peor de los casos el suicidio, trastornos de delirio, la esquizofrenia y demás trastornos de la personalidad.

De este modo, el mecanismo de defensa ayuda a que la psiquis de la persona mantenga su funcionamiento normal.